jueves, 17 de julio de 2008

Cosas en las esquinas

Cuando uno esta detenido y ocioso, justo en la frontera del tedio, emergen a la vista las cosas que olvidamos en las esquinas más inverosímiles. Viejos papeles esbozando historias imposibles o rutas trazadas en la brisa de sueños apartados... hace tiempo. Cajones con mil objetos descatalogados de nuestra memoria caprichosa pero que por algún secreto motivo seguimos arrastrando de una casa a otra, de un momento de la vida al siguiente. Los mantenemos a nuestro lado pero su antiguo significado se nos va escapando y la historia que albergan bajo el polvo, cada vez nos habla desde más lejos y con menor convicción. Y así van tomando poco a poco su sitio en las esquinas lejos de la mirada despierta, formando con sus huellas un mapa, una constelación sombría o tal vez un absurdo mandala que nos recuerda, sólo en esos momentos antes del tedio, que todo lo perdemos como el puño que inútil se esfuerza en mantener la fina arena del tiempo entre los dedos.